¿Cómo elegir un césped artificial?
Principales aspectos a tener en cuenta.
1. La función del césped artificial.
Dependiendo del uso que vayamos a dar al césped artificial, deberemos escoger uno u otro modelo. No es lo mismo ajardinar una zona puramente ornamental -que no va a ser pisada-, que otra donde vayamos a “hacer vida”, con una barbacoa, una piscina, o una zona de juego para niños. Los modelos de césped artificial de que disponemos en nuestra cartera, están específicamente diseñados y fabricados para cada uso: jardines y piscinas, perros y mascotas, zonas de juego, ferias y eventos, espacios públicos, deportivo, o de diseño. Tienen diferentes años de garantía, y son la mejor solución para obtener un resultado impecable y duradero en cualquier instalación. En cualquiera de los modelos, la suavidad del hilo y la combinación de colores proporciona a cualquier espacio un realismo sorprendente. Fabricados con tecnología de última generación, están basados en mono filamentos de polietileno con soporte primario en tejido de polipropileno estabilizado con UV.
2. El presupuesto con el que contamos.
Escoger correctamente también implica tener en cuenta la inversión inicial que supone la compra del césped artificial y su instalación. Aunque inicialmente el coste del césped artificial es superior al del césped natural, es amortizado rápidamente por el ahorro de agua, abono, tiempo, cuidados y preocupaciones que no tendrás que hacer. Dedícate sólo a disfrutar…
¿ES TODO?, ¿NO DEBERÍA SABER ALGO MÁS PARA ELEGIR ADECUADAMENTE?
Hay otros factores importantes a tener en cuenta a la hora de elegir un césped artificial:
1. ¿Cuál es la calidad del hilo?.
La calidad del hilo es un aspecto muy importante. Existen dos tipos de hilo:
– Mono filamento: tiene una alta resistencia al desgaste, y puede incorporar lo que se denomina “memoria”. Es decir, que la fibra recupera su verticalidad después de ser pisada. En general, cuanta más “memoria” tenga el césped, más dureza y menos agradable será al tacto.
– Fibrilado: suele ser un hilo de inferior calidad, más ancho que el mono filamento, y cortado longitudinalmente para darle la anchura deseada. Es aconsejable sólo para zonas poco transitadas.
-Texturizado: Se usa como relleno de los dos anteriores quedando por debajo del hilo principal y aporta resistencia y elasticidad. Son las fibras que vemos cuando separamos el hilo principal y suele tener diferentes colores para hacer mas “natural” al cesped.
No te dejes llevar por productos extremadamente suaves, cuanto más sedoso y/o fino sea el hilo del césped artificial, más delicado y menos duradero será. Las fibras terminarán por quedar totalmente aplastadas.
Asegúrate y pide que te demuestren que el producto cumple con la normativa de la CEE (ISO 9001, ISO 14001, Certificado de reacción al fuego, etc.). Pregunta si el hilo está estabilizado contra los rayos UVA, y consulta las garantías de color y durabilidad que ofrecen.
La calidad y el peso total del producto por m2 están directamente relacionados con el coste final del producto.
2. La densidad de la fibra (DTEX).
La definición de TEX es “peso en gramos de 1.000 metros de hilo”. Normalmente utilizamos una fracción del TEX, (el decitex o DTEX, que es una décima parte del TEX), para expresar la cantidad de hilo o fibra que contiene el césped artificial, por m2. Cuanto más DTEX tiene el césped artificial, más denso es, y más cantidad de hilo contiene.
3. La medida de galga.
Es el espacio o separación que existe entre dos puntadas. La más utilizada en los modelos de césped artificial de tipo residencial es de 3/8, ofreciendo una larga vida útil del césped sintético y gran resistencia al desgaste.
4. La altura del hilo.
Es un aspecto importante, para no comparar dos modelos de césped artificial sin prestar atención a la altura de la fibra. Es evidente que, cuanto más corto sea el hilo, menos cantidad de hilo hay y por lo tanto, su durabilidad será inferior.
5. La composición de la base:
látex o poliuretano. Existen numerosas opiniones respecto a las ventajas de ambos tipos de base. En la actualidad, el látex que utilizan los fabricantes europeos está libre de metales pesados como plomo y cadmio, por lo que no existen diferencias respecto a las bases de poliuretano en cuanto al agarre de los hilos, fuerza y resistencia del producto.
6. El material de relleno o lastre (cuando sea necesario):
De una buena elección del material de relleno dependerá la recuperación del césped artificial a su posición vertical y la sensación tras la pisada, su temperatura, y que aniden o no insectos. Arena de sílice. Blanca, coloreada -marrón, verde-, o encauchada, sola o combinadas, es el abanico de posibilidades para dar un acabado perfecto al césped sintético. La arena de sílice blanca es un producto natural, inerte, y usada con la granulometría adecuada, es la perfecta compañera del césped artificial. Caucho SBR. Es un producto obtenido del reciclado por trituración de neumáticos usados. Se utiliza en instalaciones deportivas como campos de fútbol, a los que aporta elasticidad y confort. Es un producto inerte, no contaminante y respetuoso con la naturaleza, con presencia ínfima de sustancias como el cobalto, benceno, cobre o zinc, siendo inocuo para la salud humana. No es conveniente utilizarlo en instalaciones de césped sintético de tipo residencial ya que con el calor puede producir olores y elevar la temperatura de la superficie. Geofill. Compuesta a base de fibras minerales y naturales en gránulos -principalmente fibra de coco -, es la alternativa ecológica al tradicional relleno de caucho. Al tener abrasividad cero y no emitir ningún olor, se está abriendo paso poco a poco en instalaciones de paisajismo y jardinería. Sustrato natural para jardín. Es cualquier material usado como soporte para cultivar plantas o semillas. Tiene la ventaja de ser un producto natural y que huele a tierra mojada cuando se riega o llueve, pero se compacta y no evita la aparición de insectos u hongos.